Reparar a los Vivos

Título: Reparar a los vivos.
Autora: Maylis de Kerangal.
Editorial: Anagrama. Panorama de narrativas.
Págs: 243.






"Simon Limbres regresa con sus amigos de una adrenalínica sesión de surf. La camioneta en la que viaja choca contra un árbol. Poco después de ser ingresado en el hospital, el joven muere, pero su corazón sigue latiendo. Thomas Remige, un especialista en trasplantes, debe convencer a unos padres en estado de shock de que ese corazón podría seguir viviendo en otro cuerpo. Y salvar, tal vez, una vida. Éste es el contundente arranque de la novela, que mantiene al lector en vilo hasta las últimas líneas".

El final de una vida y el renacer de otra. 24 horas desde que un corazón deja un cuerpo para habitar en otro. El intercambio de una muerte por una vida.

Un mar de emociones durante la lectura. Una tremenda tristeza por los padres que se enteran de la muerte de su hijo, de lo rápido que todo sucede, consternados por el dolor deben tomar decisiones importantes en muy pocas horas. Tu hijo está muerto, pero su corazón late...
Un horror porque su cuerpo está todavía caliente, el pecho se agita, el corazón late, pero te dicen que está muerto, su cerebro ha muerto. Difícil muy difícil aceptarlo.

Enfermeras, médicos, pacientes, padres, toda una cadena humana entra en acción durante esas cruciales horas en las que se tiene que actuar sin espera.
Complicada la situación del coordinador de enfermería, encargado de pedirles a los padres rotos de dolor la donación de los órganos de sus hijos. ¿Qué palabras usar, qué decir ? Pero hay que reaccionar rápido cada minuto cuenta para salvar vidas. Sin duda un profesión muy difícil.

Los detalles del procedimiento, de lo que ocurre dentro de los quirófanos en el que da y en el que se recibe, es dura, real y brutal. En varias ocasiones pensé en pasar de página y saltarme esta parte, al final con unas pequeñas pausas durante la lectura logré digerirlo.

Hay dos realidades, la de los padres que pierden a su hijo, y la de los hijos que pueden perder a su madre sino recibe un corazón. Esperanza de unos, desesperanza de otros..

Reflexiones después de leerlo, ¿es el corazón sólo un músculo que bombea sangre o también un músculo capaz de almacenar sentimientos y emociones?. Si es así, ¿la persona que lo recibe podrá experimentar  cambios en su vida? que hay de "me lo dice el corazón" o " sigue a tu corazón"...

Impresionante la manera que tiene la autora de reproducir la realidad. No está escrito con sentimentalismo, aborda el tema de una manera fría, científica, real. Un lenguaje rico, un ritmo frenético que te deja jadeando. Te hace sentir todas las emociones, miedo, urgencia, tristeza, esperanza...Una novela de gran intensidad escrita  de una manera hermosa.


Una historia de muerte, y de vida.